DEJARTE IR AUNQUE SIGO ACA.

Aca estoy, esperando un mensaje tuyo cuando te bloquee de todos lados. Aca estoy, recordándote, pensándote, cuando te dije en la cara que ya estaba desenamorada de ti. Aca estoy reviviendo las discusiones, los desencuentros que nos hacían alejar solo para no caer en lo mismo, para no sentirme manipulada por mi propio ilusionismo.

Aca estoy, sintiéndome sola, con una parte de mi vacía, cuando te hice prometer que si yo algún día me quiero ir de tu vida, me busques. Aca estoy, escribiendo sobre vos cuando siempre te dije que soy una persona que suelta lo que le hace daño.

Que juego vicioso el querer que funcione. ¿Lo intenté todo? Siempre vuelvo al mismo lugar cuando se trata de vos.

Aca estoy, llorando, volví a contestar tus mensajes. Vuelvo a tratar de hacerte entender qué es lo que duele en verdad cuando miles de veces dije que lo nuestro ya se terminó. Y sí, también te dije que no me doy por vencida tan fácilmente pero luego seguí con que hay un limite, con que si vos vas a seguir quedándote en el molde, me iba a elegir a mi y así fue, o al menos eso trato. Tengo tu remera puesta.

De a poco se derrumba la montaña que fuimos creando, de deseos acumulados... entre vos y yo. Tengo que aceptar todas las cosas que te digo, que me digo, que digo... pero me siento muy ajena todavía a la idea de no verte más. 

Me desenamoré muy temprano, te equivocaste muy temprano y se nos hizo tarde. Sigo dando vuelta el reloj de arena. Vivo al borde y caigo. Ya no importa nada y se siente lo contrario. 

Aca estoy, preguntándome cómo haces para demostrarme siempre que sos un poco mas fuerte que yo. Siempre termino esperando. No recibo. Vuelvo a perder, no se comprende. Es simple. ¿La difícil seré yo? Quizás nunca te perdoné, quizás me olvidé cómo es estar sola y entre tantas vueltas, no logro enfrentarme y en la balanza pongo todos los recuerdos que le dan significado a todos mis te amos y vuelvo, quizás siempre encuentro una manera de no perder aunque sea la forma en la que me miras, o quizás no puedo y punto. ¿Cómo aceptar eso? Quizás tampoco me reconcilio con el pensamiento de que serás alguien como cualquier otro. Y sabes que no tengo a nadie más. ¿Acaso me acabo de responder a todas mis preguntas? Mi primera vez, cómo soltar.